La mayoría de las mujeres emprendedoras optan por comenzar en sectores conocidos, porque les parecen menos arriesgados. Pero tenéis otra opción: buscar un nicho en un sector en auge. La ventaja es que suele haber menos competencia, sobre todo si vuestra idea es original y responde a una necesidad real. Porque esas son las dos preguntas que debéis haceros: ¿qué? y ¿para quién?
Uno de los sectores que más crece en estos momentos es el de la silver economy (o economía plateada), que engloba todas las actividades económicas, productos y servicios destinados a satisfacer las necesidades de las personas mayores.
Los mayores tendrán la llave de la economía mundial
Como diría una amiga mía, dentro de poco todos seremos viejos y, la verdad, no anda descaminada. En 2060, uno de cada tres europeos tendrá más de 60 años. La misma tendencia se observa en el resto de países desarrollados, acompañada de un espectacular aumento de la esperanza de vida y de una caída generalizada de la natalidad, lo que está dando un vuelco a las pirámides de población en el mundo.
- La economía se silveriza
Según los expertos, eso va a provocar una «silverización» de la la economía. Es decir, que se van a necesitar muchísimos productos y servicios para responder a las necesidades de los mayores, teniendo en cuenta que las personas que ahora llegan a la jubilación son muy distintas de las de la generación anterior.
Así son las personas que están empujando la economía silver :
– se mantienen muy activas
– disponen de tiempo libre y lo quieren dedicar a viajar, a actividades culturales y de ocio, y a vivir nuevas experiencias.
– les gusta cuidarse, hacer deporte, comer bien e ir a la moda
– y, según las estadísticas, disponen de un patrimonio y un poder adquisitivo significativo (once veces superior al de los millenials, según la Reserva Federal estadounidense).
Por eso, las buenas ideas en el terreno de la silver economy son diamantes en bruto.
Las empresas con más futuro son las dedicadas a la innovación tecnológica (Internet de la Cosas, Inteligencia Artificial…), pero no voy a ir por esos derroteros, porque conllevan una gran inversión económica y desarrollo de I+D. En su lugar, os voy a presentar algunos negocios que ya se están desarrollando al calor de este vuelco social y que creo que os podrían inspirar.
Algunas ideas de negocio
- Comidas a domicilio
Las personas de esta generación silver buscan soluciones simples que le faciliten su día a día y les permitan seguir viviendo en su hogar.
En ese sentido, están surgiendo empresas dedicadas a repartir comidas a domicilio pensadas para los mayores. Son empresas como Miplato o Menudiet en España, que permiten contratar menús semanales pensados para cubrir las necesidades nutricionales de los más mayores y adaptados a las diferentes patologías.
En el mismo ámbito, se podría, por ejemplo, desarrollar gamas de alimentos o de complementos pensados específicamente para ellos.
- Venta online o en tienda física de productos para mayores
También están surgiendo numerosas tiendas físicas y online dedicadas a la venta de productos para facilitar la vida cotidiana de los mayores.
Los productos tecnológicos merecen un capítulo aparte, porque es una generación que quiere estar conectada, pero para ello tiene que contar con dispositivos sencillos de utilizar y adaptados a sus limitaciones visuales y auditivas.
- Romper el aislamiento
Un problema al que a menudo se enfrentan los mayores es el aislamiento. En ese sentido se podrían desarrollar proyectos que les permitan restablecer los vínculos sociales. Por ejemplo, plataformas que sirvan para relacionar a unas personas con otras para formarse, hacer deporte, tener compañía o acoger en su casa a estudiantes…
- Adaptación de viviendas y la creación de viviendas colaborativas o cohousing
La adaptación de viviendas va desde la reforma integral a la introducción de elementos que faciliten la vida cotidiana: supresión de barreras, salvaescaleras o elevadores, reformas de baños y domótica.
Y luego están los proyectos de cohousing, un anglicismo que sirve para referirse a la construcción de complejos de casas o apartamentos colaborativos para personas mayores. A menudo los ocupantes no son propietarios, sino socios. Pagan una cuantía inicial para poder ocupar una vivienda, de forma individual o en pareja, y luego cuotas mensuales para beneficiarse de servicios como comida, atención sanitaria o fisioterapia. Los complejos también suelen incluir espacios comunes, como comedor o gimnasio. En España, un proyecto de este tipo es la cooperativa Convivir, en Horcajo de Santiago (Cuenca).
El objetivo en ambos casos es que las personas mayores puedan seguir viviendo en su hogar.
- Vehículos eléctricos para ganar en autonomía
Algo bastante común en Estados Unidos y Canadá, pero muy poco extendido en Europa, es el uso de pequeños vehículos eléctricos, parecidos a motos, para desplazarse por la ciudad o ir a comprar al supermercado. Vehículos como estos dan a la persona una gran autonomía y su venta podría dispararse en los próximos años, del mismo modo que se han multiplicado las ventas de patinetes y bicicletas eléctricas.
- Salud, deporte, belleza y viajes
Los negocios relacionados con la salud, como las aplicaciones terapéuticas, también se espera que experimenten un boom.
Hay empresas que han empezado organizan vacaciones para seniors. A menudo se trata de circuitos originales (rutas en velero, cruceros marítimos o fluviales o viajes a destinos lejanos) y pueden incluir un acompañante, para que el cliente se sienta más arropado en caso de que suceda algo.
Y por qué no pensar, por ejemplo, en gimnasios para mayores, centros de belleza o clubes, eso sí, muy alejados del típico centro de jubilados de nuestros abuelos.
Me he limitado a dar unas cuentas pinceladas, pero espero haberos aportado alguna idea útil sobre la que construir vuestro propio proyecto. En próximos artículos abordaré otras posibilidades en sectores en auge y en otros más tradicionales, incluidas las franquicias. También analizaré las razones por las que las mujeres de más de 45 años se han convertido en uno de los grupos más emprendedores.
Hasta pronto. Un abrazo, mujeres maravillosas.
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